"La libertad sólo para los que apoyan al gobierno, sólo para los miembros de un partido (por numeroso que éste sea) no es libertad en absoluto. La libertad es siempre y exclusivamente libertad para el que piensa de manera diferente. No a causa de ningún concepto fanático de la "justicia", sino porque todo lo que es instructivo, totalizador y purificante en la libertad política depende de esta característica esencial, y su efectividad desaparece tan pronto como la "libertad" se convierte en un privilegio especial."
Rosa Luxemburgo

martes, 15 de julio de 2008

CUBA: del ¿Socialismo? Real a la Realidad Capitalista

Aqui les va un texto escrito por un camarada. Es un texto breve pero una respuesta socialista a los ataques que prepara el gobierno en contra de la seguridad social en Cuba.

Un "vago"




“Socialismo significa justicia social e igualdad, pero igualdad de derechos, de oportunidades, no de ingresos. Igualdad no es igualitarismo. Este, en última instancia, es también una forma de explotación: la del buen trabajador por el que no lo es, o peor aún por el vago.”

Frase que pasará a la Historia pronunciada por Raúl Castro ante la Asamblea Nacional del ¿Poder Popular? ¿Cuál es la justificación que da el heredero de la familia Castro a su frase? Pues la justifica mucho en su discurso, pero en el fondo es así porque él lo dice. Y, como lo ha consensuado con su hermano, será verdad.

Según esta “familia real” cubana, detentadores perpetuos del poder que tanto han “trabajado” a lo largo de su dilatada vida, la igualdad nada tiene que ver con que la gente tenga los mismos recursos económicos. Tampoco tiene que ver con aquella vieja máxima del movimiento obrero que decía: “a cada cual según sus necesidades, de cada cual según sus posibilidades”. Para nada. Según los hermanos Castro, la igualdad se basa en la capacidad de producir de cada uno. La frase exacta ha sido: “que cada cual reciba según su trabajo”. Según ese tan “socialista” principio, los que más produzcan verán aumentar sus sueldos, sus recursos económicos. Así se evitará la existencia de “vagos” que puedan deslucir la maravillosa “democracia socialista” que hay en Cuba.

A partir de ese tan “profundo pensamiento”, fundamentado en la historia entera del pensamiento “socialista”, los hermanos Castro introducen toda una serie de medidas que incluyen la disparidad de salarios en los mismos puestos de trabajo (¿plus de productividad?), la continuidad del trabajo después de la edad de jubilación, la eliminación de “gratuidades indebidas” y subsidios, el pluriempleo,…

Desde los ámbitos de la ¿izquierda? pro-castrista mundial se alzarán voces a favor o en contra de estas medidas. Para algunos será una correcta adaptación a las necesidades del momento; para otros será un mal menor que salve la “contrucción socialista” en Cuba; para otros será una desviación del “camino socialista” que se iniciara en el 59; y para otros, incluso, será un “glorioso avance” en la “edificación del socialismo” cubano.

Nosotros somos más modestos. Tan sólo nos surgen algunas preguntas:

¿Qué diferencia hay entre las medidas “socialistas” del gobierno de los Castro y las medidas que en el resto del mundo se están aplicando?

¿Verán peligrar sus salarios los miembros de la Asamblea Nacional dado que lo único que saben producir es leyes? ¿O les darán un plus de productividad por ley aprobada?

¿Cuál será la situación en la que queden los hermanos Castro? ¿Les aumentarán mucho los sueldos teniendo en cuenta todo lo que trabajan dando discursos?

¿Para qué tantos socialistas se dedicaron a soñar con una sociedad radicalmente distinta, igualitaria, y lucharon e incluso murieron por esa sociedad?

¿Quiénes son los verdaderos vagos, los parásitos a los que el verdadero socialismo condenará a ser un mero recuerdo de la Historia?